Bali, Indonesia, 11 de diciembre, Pl, para RIA Novosti. El Programa de Desarrollo de la ONU (PNUD) afirmó en un informe que circula hoy aquí que se necesitan 86 mil millones de dólares para detener el avance hacia una segregación en la adaptación del cambio climático.
El documento IDH 2007-2008, titulado "Luchando contra el cambio climático: Solidaridad humana en un mundo dividido", subraya las amplias diferencias en la financiación para la adaptación.
Advierte de que el mundo avanza hacia esa segregación con los países ricos invirtiendo con fuerza en infraestructuras climáticas y los más pobres abandonados a su suerte con sus propios recursos.
El comunicado alerta que esas desigualdades en la capacidad para tratar con el cambio climático impulsará con fuerza las desigualdades globales.
Esta recopilación anual del grupo de Desarrollo Humano del PNUD se distribuyó entre los más de 10 mil delegados de 187 países que participan en la conferencia de dos semanas de ONU en esta isla indonesia.
La Convención, que se encuentra ya en su fase decisiva, busca redactar una hoja de ruta para las negociaciones encaminadas a definir un acuerdo climático en los próximos dos años, antes de que la actual fase del Protocolo de Kyoto, concluya en el 2012.
El principal autor del informe, Kevin Watkins, solicita un incremento gradual de la financiación para la adaptación y subraya la necesidad de un compromiso financiero anual de 86 mil millones de dólares para 2015.
Watkins reconoce que ssas cifras son grandes, pero que también lo son los costes humanos del cambio climático y asegura que los pobres del mundo no son los responsables del calentamiento global.
Los países desarrollados deben asumir sus responsabilidades, entre ellas la de proteger a las víctimas potenciales del mismo, asegura.
Watkins explica que la partida se destinará a la protección social y a las inversiones en materia de medio ambiente, con financiación suplementaria para las respuestas humanitarias a catástrofes climáticas.
El experto ejemplifica que el gasto actual de los mecanismos multilaterales de financiación sumó menos de 26 mil millones de dólares en los últimos dos años, menos de lo que Gran Bretaña gasta en una semana en protección alimentaria.
Watkins puntualiza que esa cifra habla por sí sola y de ahí que, los esfuerzos de adaptación internacional sufren de infrafinanciación crónica, lo que refleja la baja prioridad que se le concede a este asunto.
