La empresa rusa Eurochem tiene la intención de construir en Venezuela una planta de fertilizantes nitrogenados con capacidad de más de un millón de toneladas. La eventual nacionalización del sector agroquímico venezolano y la posición especial que tienen en este país sudamericano las compañías rusas permiten a Eurochem acceder a nuevos recursos gracias a dicho proyecto.
Siendo la mayor productora rusa de fertilizantes, con un volumen que se aproxima a seis millones de toneladas anuales, Eurochem ingresó el pasado año US$1.964 MM y cerró el ejercicio con un margen neto de US$257 MM.
"Ahora necesita demostrar su potencial del incremento, tal vez, con vistas a la futura venta de la empresa", considera Marina Alexéienkova, analista de Renaissance Capital. Instalar una fábrica en Venezuela también es ventajoso porque implica el acceso a nuevos mercados libres de aranceles.
Gueorgui Ivanin, experto de Entente Capital, piensa que el proyecto venezolano de Eurochem podría costar entre US$200 MM, si se amplían algunas capacidades existentes, y US$500 MM, si se decide construir la planta desde cero.
En el pasado, los ejecutivos de Eurochem mencionaron la posibilidad de lanzar una oferta pública inicial para financiar el desarrollo de Gremiachaya, un yacimiento de potasio situado en la provincia de Volgogrado. Se calcula que la empresa necesita casi mil millones de dólares para montar allí la producción, prevista para el año 2012.
La principal productora venezolana de fertilizantes es Petroquímica de Venezuela, S.A. (Pequiven), empresa pública que tiene planes de expansión muy ambiciosos y ha proclamado más de una vez la intención de convertirse en la número uno del mercado global de abonos nitrogenados. La compañía posee una participación del 34,99% en FertiNitro, el mayor complejo productor de fertilizantes en Venezuela, y busca socios para promover la construcción de la planta FertiNitro-II.
La eventual nacionalización del sector agroquímico, tal y como ocurrió con la industria petrolera, podría obstruir la cooperación de Pequiven con empresas occidentales. Una ley adoptada en marzo obliga a los productores de fertilizantes nitrogenados a priorizar las ventas en el mercado doméstico y aplicar precios razonables. La agencia internacional de calificaciones Fitch Ratings cree que los acuerdos originales de FertiNitro podrían someterse a una revisión en fuerte detrimento de los socios extranjeros, que hacen a Pequiven exportar el 50% de lo que produce allí a precios de mercado.
Las empresas rusas se benefician de privilegios notables en Venezuela, así que Eurochem podría incorporarse al proyecto FertiNitro.
