Ginebra, 30 de marzo, RIA Novosti. Los países miembros del Consejo de Derechos Humanos de la ONU siguen preocupados por la grave situación creada en la provincia de Darfur, en Sudán, pero no han condenado a ninguna de las partes implicadas en el conflicto.
Los observadores y los organismos de derechos humanos esperaban que el Consejo adoptaría una resolución mucho más dura sobre Sudán a partir del informe que había presentado la comisión especial del Consejo de Derechos Humanos. La comisión acusó a las autoridades sudanesas de las graves violaciones de derechos humanos y delitos militares en Darfur.
El informe reza que la "situación en Darfur se caracteriza por violaciones sistémicas y generalizadas de los derechos humanos y graves infracciones del Derecho humanitario Internacional".
Según estimaciones de la ONU, el conflicto armado entre las milicias progubernamentales árabes y grupos rebeldes, que no cesa desde febrero de 2003, ha cobrado ya más de 200.000 víctimas humanas, mientras que casi 2,5 millones de personas han tenido que abandonar sus hogares.
