Moscú, 1 de febrero, RIA Novosti. Rusia va a continuar la construcción del Estado de Unión con Bielorrusia, afirma Vladímir Putin al comentar las eventuales consecuencias del reciente conflicto entre Moscú y Minsk en materia de hidrocarburos.
En particular, el presidente ruso no descarta que ambos países se decanten por la introducción de una moneda única y acaben formando una unión aduanera en pleno sentido de este término. La homologación de las tarifas del crudo y los derivados del petróleo, aceptada por Minsk, es un paso real en esta dirección, opina él.
Putin no cree que Rusia se haya visto rodeada de países poco amistosos a resultas de la política aplicada por el Kremlin. ‘Es muy fácil traicionar los intereses nacionales y sentirse contento porque te elogia todo el mundo - observa él -. Pero no siempre puedes evitar tensión y nerviosismo cuando construyes una relación pragmática defendiendo los intereses propios'.