Madrid, 19 de julio, RIA Novosti. El rey de España Alfonso XIII desarrolló muchos esfuerzos por salvar al último emperador ruso Nicolás Segundo y su familia, afirma el historiador español César Vidal.
Según él, el rey intentó primero convencer al Gobierno Provisional de Rusia y luego a los bolcheviques de que le dejasen a Nicolás II salir de Rusia para instalarse en España.
Según documentos de archivo, Alfonso entregó la propuesta de dar asilo en España a la familia Romanov al embajador del Gobierno Provisional de Rusia en España, Nejliudov, ya en primavera de 1917, pero no recibió ninguna respuesta.
El monarca español también intentó actuar con mediación de los aliados de Rusia, en primer lugar Gran Bretaña, en espera de que su rey Jorge V se vea capaz de persuadir a los dirigentes de Rusia dejar salir al zar para España.
Pero Jorge V no mostró ningún interés hacia la propuesta de Madrid, señala César Vidal.
Luego el monarca decidió apelar a Suecia y Noruega, pidiéndoles tramitar la liberación de la familia del zar y hasta quería mandar un buque español para sacarla de Rusia. Pero los escandinavos no quisieron prestar ayuda. Lo de dirigirse al káiser alemán, que sostenía las negociaciones de paz con las nuevas autoridades rusas, tampoco dio resultado. Entonces, Alfonso XIII mandó a Rusia a un eminente diplomático español, Fernando Gómez Contreras. Durante las negociaciones sostenidas se habló de que Madrid podría reconocer el poder soviético a cambio de la liberación del monarca ruso.
El diplomático español sentía mucho optimismo, informaba al rey de que las conversaciones se desarrollaban bien. El influyente periódico español ABC hasta escribió que los bolcheviques estaban a punto de dar su visto bueno a la solicitud de España.
Lo malo era que las negociaciones en Rusia se desarrollaban en septiembre de 1918, pasados casi dos meses después de que el zar había sido fusilado. Se trataba de un juego diplomático por parte de los bolcheviques, subraya el historiador.
Al explicar los insistentes esfuerzos que desarrollaba Alfonso XIII por salvar a Nicolás Segundo, César Vidal señala que entre ellos existía un lejano parentesco. El monarca español, la esposa del cual era consanguínea de los Romanov, siempre trataba con simpatía a la familia del zar ruso. Pero ellos nunca se conocieron en persona. Sólo mantenían correspondencia e intercambiaban regalos. Es curioso el siguiente hecho: cuando la esposa de Alfonso XIII, la reina Victoria Eugenia, se refería a los miembros de la familia real rusa, siempre los llamaba "mis primos".
Alfonso XIII era un hombre pacífico y humano. No permitió que su país fuese arrastrado a la primera guerra mundial, y más tarde intentaba ayudar en lo que podía a los prisioneros de ambas partes en conflicto. Por ejemplo, logró salvar de la muerte al gran bailarín Vaclav Nizinski, cuando éste se vio en un campo de concentración.
La trágica muerte de Nicolás Segundo hizo una profunda mella en el monarca español. Por algo cuando en el año 1931 en España surgió una situación revolucionaria, él se apresuró a abandonar el país, temiendo por la vida de sus hijos, señala César Vidal.
