Los experimentados trabajadores son los mismos que ya lograron realizar otras iniciativas ambiciosas como la línea de ferrocarril BAM —que atraviesa Siberia Oriental y el Lejano Oriente—, las infraestructuras necesarias para la cumbre de APEC de 2012 en Vladivostok y las de los Juegos Olímpicos de 2014 celebrados en Sochi.
El puente que conectará Crimea con el resto de Rusia a través del estrecho de Kerch se está construyendo sobre 595 pilares y, según informan las autoridades rusas, estará listo para diciembre de 2018.
Además, la faraónica obra contará con dos líneas de ferrocarril por las que circularán 47 trenes diarios en cada sentido, que serán los encargados de transportar a 14 millones de personas cada año.