Lanzarse a las aguas desde este lugar es una hazaña bastante arriesgada y solo los saltadores más experimentados pueden atreverse con ello. Tradicionalmente, y desde hace siglos, los jóvenes saltan desde el puente Stari Most, que también es el monumento nacional más reconocible y famoso del país.
Esta práctica se remonta a los tiempos en los que se construyó el puente —entre los años 1557 y 1566—, pero el registro del primer salto se produjo en 1664. En 1868, el concurso fue inaugurado oficialmente y se celebra anualmente durante el verano.