“El primer crimen es el de integrar una organización o al menos de intentar promoverla. Basta con que el individuo esté promoviendo, personalmente o por cualquier medio de comunicación, actos terroristas o propaganda exaltando actos terroristas”, afirmó Josegrei en relación a los artículos 3º y 5º de la Ley Antiterrorista 13.260 de Brasil.
El ministro brasileño de Defensa califica a los sospechosos de terrorismo de “tarados"https://t.co/yqS6QhiS9w pic.twitter.com/SQgCSQIIL7
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) July 22, 2016
En este sentido, el magistrado apuntó que en las conversaciones interceptadas por la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN) se observaron “conversaciones en las que se habla de la cercanía de los Juegos Olímpicos” y, ya que Brasil no forma parte de la coalición internacional contra el terrorismo, “sería una oportunidad para atentar contra las personas de otros países de la coalición”.
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Por último, confirmó que la edad de los detenidos varió “entre los 20 y los 40 años” y que ninguno de ellos era de ascendencia árabe aunque se identificaban con apodos en este idioma en los grupos interceptados en las aplicaciones WhatsApp y Telegram, lo que hace pensar que, en efecto, no serían verdaderos integrantes del Daesh sino meros simpatizantes o “captados” por la organización terrorista
