"Las FME concluirán en 2016 la modernización de los polígonos, lo que contribuirá al aumento del número y la intensidad de las pruebas de nuevos armamentos y material bélico", dijo su portavoz, el mayor Dmitri Andreev.
Agregó que esa medida permitirá realizar pruebas, no solo para Defensa, sino también para otros organismos nacionales y socios extranjeros de Rusia.
Se trata en particular de una base militar en la provincia de Astraján, en el sur de Rusia, y una en Kazajistán.