El documento al respecto, publicado este viernes en un portal oficial de información legislativa, hace una exclusión para los utensilios de oficina y las flores.
Los funcionarios tendrán tres días laborales desde el momento en que hayan obtenido el obsequio para entregarlo a la administración presidencial o a otros organismos competentes.
Si un funcionario recibe un regalo durante un viaje de trabajo, deberá entregarlo durante los tres días siguientes a su retorno a Rusia.
Una vez donado el obsequio, su dueño podrá comprarlo de vuelta, para lo cual tendrá que redactar una demanda. Los objetos que no hayan sido demandados se utilizarán para las necesidades de la administración.
En enero de 2014 el primer ministro de Rusia, Dmitri Medvédev, firmó un decreto según el cual los funcionarios rusos debían entregar todo regalo cuyo precio superara los 3.000 rublos (unos 57 dólares).