En la ciudad de Salem, Massachusetts, conocida por los juicios de brujas en el siglo XVII, los líderes de un templo satánico se reúnen para que los niños de escuelas públicas tengan dos opciones: Jesús o Satanás.
"Es muy importante que los niños sepan que hay múltiples perspectivas sobre todos los temas", dijo Doug Mesner, cofundador del templo, al Washington Post.
La batalla del Templo Satánico no es para promocionar la veneración al diablo entre los chicos. Se trata más bien de una disputa legal que apunta a la separación entre el Estado y la Iglesia. Busca secularizar los colegios públicos del país.
De acuerdo con Mesner, Satán es solo una construcción metafórica para representar el rechazo a todas las formas de tiranía sobre la mente humana.
El grupo propone "El Club de Satán para Después del Colegio" en primarias públicas. El programa propuesto para este club extracurricular incluirá una merienda saludable, lecciones de literatura, actividades de aprendizaje creativo, lecciones de ciencia, rompecabezas y un proyecto de arte. Cada niño recibirá un carnet de membresía y deberá contar con el permiso de sus padres para asistir.