Buques de guerra de ambos países junto con la aviación naval y unidades de infantería de marina se ejercitarán en operaciones militares en una región donde tanto Rusia como China tienen disputas territoriales, destaca el periódico.
Y es que, recuerda Nezavisimaya, hace tan solo una semana en esta misma región concluyó un simulacro naval que EEUU llevó a cabo junto con sus aliados de Japón, Corea del Sur, Australia, Nueva Zelanda, Malasia y Filipinas.
Por ello, "el entrenamiento de China y Rusia en operaciones de desembarco podría considerarse como una respuesta forzada ante actuaciones de otros países en la región", recalca el diario y recuerda, en particular, que Japón mantiene sus pretensiones sobre las islas rusas Kuriles del Sur.
"El que Rusia refuerce su infraestructura militar en la costa del Pacífico evidencia la existencia de amenazas reales a su integridad territorial en esa región", concluye el rotativo.
El Ministerio de Defensa ruso anunció con anterioridad que las maniobras Cooperación Naval 2015 (II) implicarán a una veintena de buques de guerra y barcos de apoyo logístico, además de aviones y helicópteros de la aviación naval.
Por su parte, el departamento castrense chino indicó que "el objetivo de los ejercicios será fortalecer las relaciones estratégicas bilaterales, profundizar la cooperación entre los Ejércitos ruso y chino y prepararse para enfrentar conjuntamente las amenazas en el mar".
