"Cuba es un socio y un aliado seguro de Rusia en América Latina (…) y en más de una ocasión demostró que las relaciones con Rusia son una prioridad incondicional y no dependen de la coyuntura política", dijo.
También calificó de exitosa la cooperación económica y comercial entre ambas naciones, que, según su opinión, contribuye al avance de las reformas que lleva a cabo el Gobierno cubano.
"La política de modernización de la economía y el apoyo al sector no estatal dan sus frutos y cuentan con el respaldo del pueblo cubano", señaló.
Díaz-Canel Bermúdez a su vez declaró que los dirigentes cubanos valoran altamente la cooperación entre La Habana y Moscú en materia política y económica.
La cooperación ruso-cubana se apoya en la Declaración sobre Principios de Interacción entre la Federación de Rusia y Cuba y el Memorando de Principios de Cooperación Estratégica que fueron firmados respectivamente en 1996, en La Habana, y en 2009, en Moscú.
En 2015, el volumen del comercio bilateral bajó el 17 por ciento, en comparación con el año 2014 y registró unos 136 millones de dólares; de enero a marzo de 2016 se situó en 70 millones de dólares, a las exportaciones rusas correspondieron 56,9 millones y a las importaciones, 13,2 millones de dólares.
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Entre los derroteros más prometedores de la cooperación figuran la infraestructura de transporte, las comunicaciones, la biofarmacéutica, la aviación civil, la participación de compañías rusas en el desarrollo de la zona especial Mariel y de la energía atómica.
