Asimismo el ministro de Exteriores ruso opinó que "es imperdonable mantener congelados los mecanismos creados mucho antes de la crisis siria, en particular, en el marco de las relaciones Rusia-UE y del Consejo Rusia-OTAN".
Estos mecanismos, continuó Lavrov, "buscaron prevenir actos terroristas, posibilitaron intercambiar información previamente y trabajar para que la ideología terrorista no entre en nuevas capas de la sociedad".
Occidente aprobó varios paquetes de sanciones contra Rusia, que respondió con una limitación a las importaciones de alimentos procedentes de estas naciones.
El Consejo Rusia-OTAN, creado en 2002, celebró su última reunión a nivel diplomático en junio de 2014. Desde entonces el diálogo entre la Alianza y Rusia está congelado.