La portavoz de la Cancillería, María Zajárova, exigió a Varsovia castigar a los culpables de esta "nueva espiral en la guerra contra los monumentos", en la que se han registrado últimamente al menos 10 casos de profanación y vandalismo.
En particular indicó que las autoridades polacas autorizaron el desmantelamiento del monumento al general soviético Iván Cherniajóvski pese a las reiteradas protestas por parte de Rusia.
Такие действия не только противоречат правде истории, но и оскорбительны по отнош. к памяти 600 тыс.советских солдат pic.twitter.com/dIplKXo31e
— Russian Embassy, PL (@rusemb_pl) 17 сентября 2015
Cherniajóvski fue el jefe del tercer frente Bielorruso durante la II Guerra Mundial.
El 18 de febrero de 1945 resultó gravemente herido y falleció en las inmediaciones de la localidad de Mehlsack, en la entonces Prusia Oriental (actualmente, Pieniezno, Polonia).
En 1970, en el lugar de su muerte fue erigido un monumento en su memoria.
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Además Zajárova denunció que la oficial Varsovia no haya comentado los actos de vandalismo y haya ignorado los llamamientos de Rusia al respecto.
La diplomática destacó que Moscú insiste en que Polonia cumpla en su totalidad con sus obligaciones contempladas en el acuerdo bilateral sobre enterramiento y memoria de las víctimas de la guerra y la represión.
