El documento fue aprobado unánimemente por cinco miembros permanentes del Consejo (Reino Unido, China, Rusia, EEUU y Francia) y los diez miembros no permanentes.
La embajadora estadounidense ante Naciones Unidas, Samantha Power, reiteró el compromiso de EEUU para solucionar los asuntos con Irán.
“Apostaremos por la diplomacia en las relaciones con Irán y sus líderes”, dijo Power en la sesión del Consejo de Seguridad de la ONU.
Subrayó que las sanciones contra la república islámica se aliviarán solo si Teherán cumple con los compromisos asumidos en Viena.
“Las sanciones se aliviarán solo si Irán da pasos verificables en dirección del cumplimiento del Plan Conjunto de Acciones sobre su programa nuclear”, explicó la diplomática.
Irán y el Grupo 5+1 (Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Rusia y China más Alemania) anunciaron el 14 de julio en Viena un acuerdo que establece ciertas limitaciones al programa nuclear del país islámico para excluir su posible dimensión militar a cambio del levantamiento de sanciones.
El pacto, que prohíbe a Irán enriquecer uranio a más del 3,67% durante 15 años entrará en vigor 90 días después de pasar por la aprobación en el Consejo de Seguridad de la ONU.
