"No se puede recuperar una relación normal con la Federación Rusa, no porque no nos guste, sino porque en teoría no hay posibilidad alguna para ello", ha dicho en una reunión del Consejo Interparlamentario Ucrania-OTAN.
La idea de que tras la estabilización se pueda restablecer la cooperación y la relación de antes con Rusia "es un camino a ninguna parte", según el canciller ucraniano.
El nuevo Gobierno acusa al país vecino de injerencia en los asuntos internos, mientras que Rusia desmiente ser parte del conflicto ucraniano, apoyar a las milicias de Donbás y tener tropas en esta región ucraniana.
Por su parte, los observadores internacionales presentes en la zona declaran que hasta la fecha no han detectado indicios de actividad militar no declarada.
En opinión de expertos, Kiev habla de una "agresión" rusa para responsabilizar al país vecino del fracaso de su política incluida la exterior y justificar la operación militar en el este.