España no extraditará a ministros franquistas por el “déficit democrático” de Argentina

El ministro español de Justicia, Rafael Catalá, cuestionó la petición de Argentina de extraditar a una veintena de cargos franquistas como Rodolfo Martín Villa y José Utrera Molina, porque "países con algún déficit democrático" no deberían señalar a los que sí "cumplen estrictamente la ley" sobre cómo se debe juzgar a sus compatriotas.

El Gobierno respondía así a una pregunta parlamentaria de los diputados de izquierda frente al acuerdo del Gobierno que impide la extradición de personas acusadas de crímenes de la dictadura franquistas que se ve en Buenos Aires, ante la imposibilidad de hacerlo en España.

El diputado de Izquierda Unida Joan Josep Nuet pidió hoy al Gobierno conservador de Mariano Rajoy que apueste por "justicia o impunidad", y le ha acusado de complicidad por proteger a los franquistas. "Existe un vínculo moral y político con esos verdugos franquistas", dijo.

Nuet exigió al Ejecutivo que cumpla con Interpol y acepte la extradición de los franquistas a Argentina o, por el contrario, les ponga a disposición de la Audiencia Nacional.

"Podríamos estar de acuerdo en que no se les extradite si se juzgaran en España", recordó.

El parlamentario insistió en que el Estado español tiene la obligación de investigar los crímenes de lesa humanidad, que tachó de "imprescriptibles".

Nuet denunció que las condenas a muerte de los opositores a Franco "se produjeron después de haberse celebrado juicios farsa, y me acabo de reunir en una sala en el Congreso llamada Fraga Iribarne", en referencia al pasado franquista del fundador del Partido Popular, hoy en el poder en España.

Pero el ministro español replicó que "no hace falta que ningún tribunal argentino" juzgue a los españoles y recordó que los hechos por los que se pide la extradición carecen de "responsabilidad penal".

También alegó que pese a que en la actualidad la pena de muerte es "execrable", no era así en el momento en que responsables de la dictadura de Franco firmaron penas capitales.

"Juzgar con ojos de hoy hechos del pasado puede llevar a cometer errores gravísimos", apuntó.