Según el vicejefe del Gobierno turco, para evitarlo es necesario "crear las perspectivas para un sistema democrático que desee el pueblo", mientras que Rusia, EEUU, la UE, Turquía, Irán y otros países deben "contribuir juntos a este proceso".
Kurtulmus destacó que "lo que pasa en las zonas fronterizas de Siria afecta los intereses nacionales de Turquía", por lo que Ankara "seguirá con atención la evolución de los hechos".
Al mismo tiempo, el dirigente señaló que la información sobre la supuesta preparación de una operación conjunta de Turquía y Arabia Saudí en Siria "no es fidedigna ni exacta".
El pasado sábado, la artillería turca bombardeó las posiciones de las Unidades kurdas de Protección Popular (YPG en kurdo) en la base aérea de Menagh (provincia de Alepo, en el norte de Siria) y en una localidad cercana.
Tema: Guerra en Siria
El primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu, afirmó que el ataque fue una represalia contra las YPG, consideradas por Ankara como organización terrorista, que supuestamente amenazaban la frontera turca.
Los bombardeos turcos contra las fuerzas kurdas, que provocaron una ola de críticas tanto de Rusia como de países occidentales, continuaron el domingo y el lunes.
