El diario The Independent comentó con anterioridad que Reino Unido vendió misiles a Arabia Saudí y que este país pudo haberlos utilizado durante la guerra civil en Yemen, cuando fueron destruidas muchas obras de la infraestructura civil, incluidas escuelas y hospitales.
"No reconocemos las acusaciones pero el Gobierno de Su Majestad toma en serio su responsabilidad en cuanto a la exportación de armamento", dijo la portavoz a RIA Nóvosti.
Según recalcó, Reino Unido observa el régimen de control de armas "más rígido en el mundo".
El periódico destaca que las acusaciones fueron lanzadas por importantes organismos de derechos humanos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch.
Los funcionarios británicos –señala The Independent– temen que la Corte Penal Internacional acuse a Reino Unido de implicación en los ataques contra civiles en Yemen.
En Yemen continúa la confrontación armada entre las fuerzas leales al presidente legítimo, Abdo Rabu Mansur Hadi, por una parte, y los rebeldes hutíes y los partidarios del expresidente Alí Abdalá Saleh, por otra.
La coalición de países del Golfo Pérsico y de África del Norte, liderada por Arabia Saudí, comenzó en marzo pasado una operación militar en Yemen dirigida contra las regiones del país controladas por los rebeldes.
