"Vamos a Rusia no para iniciar un diálogo sino para reunirnos con diferentes figuras y discutir la base sobre la que se pueda construir un diálogo", dijo Asad en una entrevista al semanario checo Literarni noviny.
Precisó que se trata de crear una Siria unida, de disolver las organizaciones terroristas, de apoyar al Ejército en su la lucha contra el terrorismo, entre otros asuntos.
Añadió que la postura del Gobierno sirio es "no perder cualquier oportunidad política".
"Si la oposición tiene algo que aportar y que vaya a favor de los intereses del pueblo sirio, continuaremos las negociaciones, en caso contrario no les tomaremos en serio", dijo Asad añadiendo que todavía es muy temprano para predecir si el encuentro tendrá éxito o será un fracaso.
El 27 de diciembre pasado, el Gobierno de Siria confirmó oficialmente su disposición a participar en la conferencia negociadora en Moscú.