No tiene sentido preguntarse si tendrá éxito la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que se celebrará del próximo 8 al 9 de septiembre en Vladivostok, principal puerto del Pacífico ruso.
Claro que lo tendrá, porque la presidencia de Rusia en APEC durante este año fue muy fuerte, lo que es sorprendente para un país que hasta hoy en día no ha desempeñado el papel clave en la integración económica de la respectiva región.
La cumbre del APEC es el evento que formalmente pone el punto final a este maratón anual, por lo que debe tener éxito si todo el año fue exitoso.
Ciudad rusa, sede de la cumbre de APEC
El Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico, en el que toman parte 21 economías de la región, tiene un organismo análogo en otra parte del mundo. Se trata del Gobierno de la Unión Europea en Bruselas.
Ambos enfrentan el mismo problema: su trabajo no sale a la luz pública. Ambos organismos celebran reuniones continuas año tras año, toman decisiones en el ámbito económico y producen cifras en el papel.
Pero además de las cifras, el resultado de su trabajo es la formación de dos comunidades económicas distintas: la europea y la del Asia-Pacífico.
Pero si la UE dispone del Gobierno estático y de la única capital, las capitales del APEC cambian anualmente. Este año, la ciudad de Vladivostok en el lejano oriente ruso acoge la cumbre de este organismo.
Además de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de Asia-Pacífico se desarrollan allí otros acontecimientos importantes. Este evento anual fue denominado en ruso como la semana de cumbre.
Esta semana empezó el pasado 2 de septiembre y prevé la celebración de varias reuniones paralelas. Solo al final de esta semana, los días 8 y 9 de septiembre, los máximos líderes de 21 países de la región se reunirán en Vladivostok, casi todos los que tienen peso en la región.
Como siempre, los líderes abordarán un amplio abanico de temas, incluidos los que no tienen nada que ver con el APEC, por ejemplo asuntos relacionados con Siria o Corea del Norte. Pero esto se discutirá al margen de la cumbre cuyo objetivo es hacer el resumen de la presidencia de Rusia en el APEC y aprobar el programa de la integración económica de la región para el año siguiente.
Líder ideológico de la región
En su entrevista publicada el pasado 3 de septiembre, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, hizo un resumen detallado de los resultados alcanzados por Rusia durante su presidencia en el APEC.
Al comentar esta entrevista, se puede citar el siguiente ejemplo. En la reunión de ministros responsables de desarrollo de negocios pequeños y medianos celebrada en agosto pasado en la ciudad de San Petersburgo se aprobó un programa regional para cuatro años.
Este programa puso en el primer plano la cooperación de los países de Asia-Pacífico en el ámbito de innovaciones necesarias para el desarrollo de las empresas pequeñas y medianas, su financiación y su acceso a nuevos mercados.
Además, se celebraron reuniones dedicadas el desarrollo del turismo en la región, pesca, etc. Todo está muy claro, aunque no siempre sale a la luz pública, como ya se ha dicho.
El país que asumió la presidencia tenía que no solo organizar la celebración de tales reuniones en Rusia y fuera de ella, que ascendieron a 90 en este caso. Su principal aportación es intelectual. El presidente propone el tema principal de las reuniones, lo que es una tarea complicada teniendo en cuenta que el APEC fue instituido en 1989.
Este tema debe representar interés no solo para el país que asumió la presidencia. Y lo que es lo más importante, debe dar resultado. Las decisiones aprobadas deben cumplirse por los ministros. Estas decisiones no son obligatorias para todos los países de la región. En el APEC el principio de voluntariedad sigue en vigor.
Nuevas normas, nuevos programas pueden entrar en vigor solo en varios países, otros pueden observar el proceso de su realización y adherirse posteriormente si lo estiman necesario. Sería imposible realizarlo de otro modo en el APEC que cuenta con la participación de Rusia y Japón, Tailandia y Perú, EEUU y China, etc.
En la sección de análisis de las tendencias observadas durante el año en curso en el sitio web del APEC se ha publicado el resultado de este modo de cooperación muy distinto del europeo. Según los pronósticos para 2012, el ritmo de crecimiento de las economías del APEC es el más rápido en el mundo.
Su crecimiento en general será un 4,3% del Producto Interno Bruto (PIB). El PIB de los países industrializados, como EEUU o Japón, crecerá un 2,1%, de las economías en vías de desarrollo, como China, un 6,3%. Los últimos generan un 50% del crecimiento global. Y esto pasa en la época de crisis.
Además, crece el intercambio comercial entre los países de la región del Asia-Pacífico que durante los años de la actividad del APEC aumentó un 300%.
Esta actividad incluye reuniones, grupos de trabajo, conferencias, ya que el ser humano no ha inventado todavía nada mejor. Y cada año el Estado que asumió la presidencia los organiza. Este año es Rusia.
Solo los temas económicos en la agenda
En realidad, si un país logra cumplir las tareas impuestas por la presidencia pro tempore en esta complicada estructura ya es un éxito suficiente para el ámbito de la política exterior todo el año 2012, a pesar de varios fracasos como por ejemplo relacionados con Siria. Ahora Rusia puede asumir con orgullo la presidencia de turno del G20 en 2013.
¿Cómo ha podido conseguirlo el país un 50% de cuyas mercancías van hacia Europa y que solo lidera entre las economías de Asia-Pacífico por las dimensiones de su superficie?
Los secretos del éxito consisten no solo en el talento organizador y en la realización del proyecto ambicioso de la creación de una nueva ciudad en la isla Russki, escenario de la cumbre que se celebra en Vladivostok. Se trata de la aptitud del mecanismo del APEC para la adhesión de Rusia.
Además de la mencionada flexibilidad, el cumplimiento no obligatorio de las decisiones aprobadas y otros principios de funcionamiento de APEC que no coinciden con los europeos, los temas políticos no se abordan en las reuniones del Foro.
China y EEUU son las dos economías principales de la región y miembros clave del APEC son países muy distintos, pero dentro del APEC dejan aparte sus controversias y buscan fórmulas de compromiso en asuntos económicos. En otro caso, el APEC no podría existir.
Es necesario mencionar una peculiaridad más del mecanismo de integración de los países del Asia-Pacífico presente en la isla Russki. Es un club de negocios que representa el fundamento del APEC, o sea, un mecanismo de comunicación continua, durante todo el año, de los líderes de las mayores corporaciones de Japón, EEUU, Indonesia, Rusia y otros países de la región del Asia-Pacífico con los expertos internacionales y funcionarios.
La UE no dispone de un tal mecanismo. En esta comunidad el negocio y la ciencia no está incorporada tan profundamente en las estructuras europeas.
Durante los próximos 7 y 8 de septiembre, en el marco de la semana de cumbre del APEC en Vladivostok, se celebrará la cumbre de negocios en el que intervendrán muchos líderes de 700 mayores corporaciones de la región y los jefes de Estado y de Gobierno que participan en la cumbre. Se abordará los mismos problemas sobre las posibilidades de acelerar la integración de la región.
Por ejemplo, la clase media en los mercados de los países emergentes es el nuevo consumidor. O la evaluación de las perspectivas de las zonas lejanas. Los resultados alcanzados durante la cumbre del APEC se transfieren a todos los que llegan a Vladivostok, se incorporan en los documentos de la semana de cumbre a los que se orientarán los ministros de los respectivos países durante el próximo año.
En la entrevista de Serguéi Lavrov se menciona la zona de libre comercio en toda la región y las posibilidades de alcanzar este objetivo hacia 2020, según lo previsto. La integración no implica tan solo el libre comercio. En caso del APEC, se trata de una comunidad de intereses de países distintos. Pero se dirige a este objetivo político a través de la economía. La cita de Vladivostok es un gran salto en esta dirección.
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI
