El ataque se perpetró el domingo pasado. Fueron abatidos al menos 20 extremistas. También murieron ocho soldados sirios, comunicó la agencia BNO News, basándose en un informe del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Según datos de OSDH, 5 miembros del Estado Islámico murieron alcanzados por balas durante el tiroteo. Otros 11 fueron abatidos por la Fuerza Aérea siria, 4 más intentaron escapar pero cayeron tiroteados por los militares.
El 12 de diciembre, un kamikaze del Estado Islámico dinamitó un carro de combate al lado de esa base, tras lo cual los extremistas intentaron tomarla por asalto pero fueron rechazados por los militares.
Anteriormente, un extremista quiso hacer volar un auto en el recinto del aeródromo, pero fue abatido a tiempo.
El Ejército sirio sigue repeliendo los ataques de los islamistas que se reanudaron desde comienzos de este mes de diciembre.
La base de Deir el Zor se ha convertido en el último baluarte del Ejército sirio en el noreste del país después de que el Estado Islámico se apoderara hace unos meses de la base militar en la provincia de Rakka.
