El campeón del mundo de los pesos pesados, el ucraniano Vitali Klichko, interrumpió sus entrenamientos para el encuentro con el boxeador polaco Tomasz Adamek y regresó a Kíev para estar presente en “el combate por los valores democráticos” tras el arresto de la ex primera ministra Yulia Timoshenko, decretado ayer por un magistrado ucraniano.
“Al conocer los acontecimientos en Ucrania, interrumpí los entrenamientos y regresé a Kíev porque el verdadero combate por los valores democráticos tendrá lugar aquí, en Ucrania. Y yo no puedo ser un simple observador de la situación”, dijo Klichko, que encabeza el partido “Udar” (Golpe), en una un comunicado.
Klichko hizo hincapié en la fecha en la que se dio a conocer el arresto de la líder de la oposición ucraniana.
“Timoshenko fue arrestada en vísperas del aniversario de la independencia de Ucrania. Eso evidencia que la democracia en nuestro país no ha durado ni 20 años y ya la están ahogando”, denunció.
El deportista y político ucraniano advirtió que el arresto de Timoshenko puede repercutir seriamente en la imagen de Ucrania en el extranjero.
“Si esta situación continúa, siempre viviremos en condiciones de dictadura y corrupción total, olvidándonos para siempre del desarrollo de la sociedad civil”, concluyó.
La noticia sobre el regreso del famoso boxeador para apoyar a Timoshenko fue recibida con júbilo por los seguidores de la ex primera ministra que instalaron un campamento en el centro de Kíev y amenazan con prolongar su protesta hasta la liberación de su líder.
La Justicia ucraniana está investigando desde finales de junio pasado el “expediente de gas” abierto contra Timoshenko. La Fiscalía la acusa de delito de abuso de poder por firmar con Rusia un contrato de suministro de gas en 2009.
