El funcionario subrayó que la decisión sobre la envergadura de la reducción de las armas nucleares dependerá de varios factores, en particular, "la defensa antimisil, el ataque global inmediato (Prompt Global Strike, PGS), la amenaza del despliegue de armas en el espacio, el desequilibrio entre arsenales de armas simples y la situación en torno al Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares que de momento no entró en vigor".
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 3 августа 2016 г.
"Determinaremos nuestros pasos (para seguir reduciendo las armas nucleares) teniendo en cuenta todos estos factores", agregó.
El emplazamiento de sistemas antimisiles de EEUU en Europa provocó el fuerte rechazo de Rusia, que interpreta este despliegue como una amenaza a su capacidad de disuasión nuclear mientras el programa norteamericano Ataque Global Inmediato prevé la posibilidad de asestar golpes al enemigo en cualquier punto del planeta en el plazo de una hora.
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Rusia, apoyada por China, en reiteradas ocasiones propuso a la comunidad internacional a aprobar un documento que prohíbe la militarización del espacio, sin embargo, de momento el documento no fue aprobado.
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Rusia y EEUU firmaron el START III en abril de 2010 en sustitución de los dos acuerdos anteriores, el START I de 1991 y el START II de 2002.
El documento obliga a los dos países a recortar y limitar el número de armas estratégicas.
Además, las partes están obligadas a intercambiar cada seis meses datos sobre sus armas estratégicas.