Cuba-EEUU, la normalización deportiva

© REUTERS / Enrique de la OsaDikembe Mutombo
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El proceso de restablecimiento de relaciones entre Cuba y Estados Unidos tras más de medio siglo va más allá de lo político para alcanzar otros ámbitos de la sociedad.

No podía faltar el deporte entre los sectores que ya comienzan a “normalizarse”. Con el prestigio ganado por Cuba como potencia deportiva,  la isla tiene un indiscutible atractivo también por eso, tanto para directivos y atletas, como para aficionados.

La National Basketball Association (NBA) ha sido de las primeras en desembarcar en la isla, con estrellas retiradas como el canadiense Steve Nash, dos veces MVP, el congolés Dikembe Mutombo y la portuguesa Patricia “Ticha” Penicheiro junto a entrenadores de varios equipos llegaron a La Habana para protagonizar cuatro días de entrenamientos, charlas y ojeos. Una iniciativa que la NBA implementa en más de 220 naciones.

“Hemos realizado este viaje histórico y estamos contentos de haber abierto este puente de beneficio para desarrollar el baloncesto aquí”, destacó Mutombo, embajador global de la NBA y recientemente elegido al Salón de la Fama de esa entidad.

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Nash, seleccionado en ocho ocasiones para el equipo Todos Estrellas, destacó que Cuba tiene un gran programa de entrenamiento, sólo que es tiempo de ayudar a continuar creciendo a partir de las habilidades y posibilidades de los jugadores. “Cuba ha tenido algunas dificultades y es obvio que necesita algunas cosas pero no desde luego en sus sistemas educativo y sanitario”, puntualizó el canadiense, que se retiró esta temporada.

Desde las más encumbradas autoridades hasta los atónitos aficionados que recibieron calurosamente a los basquetbolistas en barrios y canchas, motivaron el agradecimiento de los huéspedes, que destacaron la posibilidad de contribuir al crecimiento del deporte en la isla y de manera particular entre los más jóvenes.

La emblemática Ticha Penicheiro fue una de las que admitieron su alegría por interactuar con los infantes para incentivar aún más en ellos las habilidades y la cultura hacia el baloncesto, y destacó el aporte de la NBA en la recuperación de una instalación popular que contribuirá en la recreación y salud de la población.

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La europea, titular de la Asociación Femenina de Baloncesto de Estados Unidos con las Sacramento Monarchs en 2005 y cuatro veces integrante del Todos Estrellas, recordó sus primeros pasos en este deporte en una cancha de similares características y dio ánimo a los niños para llegar a convertirse en grandes figuras.

Para que no se quede solo en la anécdota, por su parte, el director regional de la  Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) Américas, Alberto García, expresó sus deseos de  que este sea el “salto inicial para un proyecto de futuro”.

García reconoció el trabajo que están haciendo los gobiernos de Cuba y Estados Unidos para lograr un “acercamiento político” y anunció que dos jugadores cubanos se sumarán por primera vez a un campamento que ofrecerán FIBA y la NBA en agosto próximo con sede en República Dominicana.

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Tras el revuelo que levantaron las canastas, vendrán los goles. El fútbol no se quiere quedar atrás,  por eso el 2 de junio está previsto que el Cosmos de Nueva York, miembro de la liga de fútbol estadounidense y liderado por el español Raúl González, sea el primer equipo en viajar a la isla. 

Seamus O'Brien, presidente del Cosmos, afirmó que “este es un anuncio histórico”, y agradeció a las autoridades cubanas por “extender la mano de bienvenida y la mano de amistad. Podemos inspirar a otros para derribar barreras”, agregó el directivo, esperando que la visita de su club ayude a “mejorar las relaciones entre las dos naciones”.

Pero sin dudas, lo más esperado es el reencuentro de las Grandes Ligas con los millones de amantes del deporte nacional. El acercamiento en el béisbol y la posibilidad de disfrutar en vivo de los hasta hace poco prohibidos partidos es algo con lo que sueñan  muchos en la isla. Hace unos días el comisionado de  la Major League Baseball (MLB) Rob Manfred destacó que las Grandes Ligas realizarán partidos de exhibición en Cuba la próxima pretemporada, y destacó su deseo de que los peloteros de la isla que juegan en Estados Unidos puedan volver a su país al terminar la campaña. “Espero que la situación en cuanto a cambios concretos de normas federales nos permita jugar algunos partidos de exhibición en Cuba la próxima primavera”,  precisó el comisionado.

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Mientras tanto, aumenta las cifras de peloteros cubanos que firman contratos multimillonarios en las Mayores, pero hasta ahora con la condición de romper con su país de origen.  Manfred había dicho anteriormente que en algún momento incluso se discutió la posibilidad de sostener partidos de pretemporada en la isla este año, pero  no hubo tiempo suficiente para realizar los trámites necesarios.

“Creo que ese es el punto de partido más probable para nosotros. Le hemos dicho al gobierno estadounidense que estamos más que dispuestos a tener un papel cuando ellos crean que es apropiado, y creo que Cuba presenta unas posibilidades muy interesantes para nosotros en el futuro”, expresó.

Más allá de exhibiciones y contactos, la verdadera normalización llegará cuando los cubanos accedan en igualdad de condiciones a la élite del deporte norteamericano. Ahora que por la parte cubana, los deportistas pueden contratarse en equipos profesionales del resto del mundo, el bloqueo sigue impidiendo que lo hagan en Estados Unidos sin renunciar a su tierra. El día que sean libres de ir y volver, sin trabas por ninguna de las partes, se podrá decir que la normalización ha llegado al deporte. Mientras, la pelota vuelve a caer en el terreno norteamericano.

 

LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE SPUTNIK

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