Mehrez Boussayene, presidente del Comité Olímpico Nacional de Túnez, comentó a Sputnik por qué cree que la candidatura de Francia se ve amenazada por el veto al traje de baño musulmán.
"Las Olimpiadas son una reunión de todas las civilizaciones y culturas. Y una reunión es una consolidación, el nacimiento de algo nuevo. Por lo tanto, es inaceptable que Francia imponga a todas las naciones y religiones sus propias reglas", comentó Boussayene.
Además de confesar estar en contra del burkini, el gerente destacó que "cualquier país que se considera democrático y respeta la libertad" no puede obligar a las mujeres a vestirse según un cierto código de vestimenta, incluso en tiempos de amenaza terrorista.
Asimismo, agregó que existe la posibilidad de que algunos países, tanto musulmanes como los que abogan por la libertad religiosa —debido a las manifestaciones islamofóbicas—, boicoteen los JJOO en caso de que Francia se convirtiera en el país anfitrión.