"Fueron heridos y hospitalizados nueve atacantes y siete policías", dijo Lesko, citado por el diario Korzar.
Se informa que además que en el pueblo, situado en el este del país, resultaron dañados varios coches, casas y vallas.
Los comensales atacaron con piedras y botellas a los policías, quienes, cuando la cantidad de asaltantes superó las 200 personas, se vieron obligados a llamar a fuerzas del orden adicionales.
"El incidente tuvo lugar en un local gitano Rudnany, cuando una familia, asustada por los ultrajes de un grupo de jóvenes, acudió a la policía", dijo Lesko.
La boda arrancó el sábado pasado y hacia la noche del lunes los huéspedes empezaron a irrumpir en las casas vecinas en busca de alcohol.
Los agentes de seguridad lograron tomar la situación bajo su control solo cuatro horas después iniciado el incidente, que ya suma a 25 los conflictos entre la policía y los gitanos locales desde principios de 2015.
Según medios eslovacos, en la República habitan más de 400.000 gitanos, pero solo un cuarto de ellos reconoce su origen en los censos.
La mayor parte de los gitanos radica en pueblos autónomos o en las afueras de las grandes ciudades, y el número de desempleados entre los representantes de la etnia asciende al 90 por ciento, mientras sus principales fuentes de ingresos consisten en subsidios y ganancias eventuales.
