Las 298 personas que viajaban a bordo, incluidos 198 de holandeses, murieron en el siniestro.
Según los informes confidenciales del Ministerio de Emergencias de Alemania, en reportes telegráficos del 15 de julio de 2014, dos días antes de la catástrofe, la entidad declaró que la situación en el este de Ucrania suscita preocupación a raíz de que un avión militar An-26 que viajaba a una altura de 6.000 metros fue abatido la víspera.
El portavoz del Ministerio de exteriores alemán, Martin Schaefer, dijo carecer de información que respalde estas acusaciones.
“No lo puedo confirmar”, dijo Schaefer.
Por su parte, el Ministerio de Transporte alemán declaró a DPA que el Gobierno no estaba informado del peligro para los aviones de pasajeros sobre el territorio ucraniano.