"¿Ed Miliband en el bolsillo de Alex Salmond? Un caos para Reino Unido", alerta el poster que el Partido Conservador lanzó este lunes.
The Conservatives Put Alex Salmond On A Campaign Poster And A Meme Was Born http://t.co/neTEAM6iEM pic.twitter.com/7HXhQscNNm
— UK Politics Lover (@UKPoliticsLover) March 9, 2015
En la imagen se reproduce, en primer plano y a gran escala, al anterior jefe de los nacionalistas escoceses mirando hacia el bolsillo de su chaqueta del que aferra un empequeñecido y compungido líder laborista.
El mensaje de la propaganda ´tory´ es claro y directo: una alianza entre laboristas y nacionalistas de Escocia cara a las elecciones generales de mayo dañará al país.
La matemática de los sondeos avala la posibilidad de este pacto post-electoral, que el equipo de Miliband ni confirma ni rechaza de antemano.
El promedio de resultados coincide en un empate entre los dos grandes partidos, conservadores y laboristas, en torno al 33% en la intención de voto el próximo 7 de mayo.
En este escenario ambas formaciones lograrían en torno a 280 escaños de los 650 que tiene la cámara de los Comunes del parlamento de Westminster.
Las mismas encuestas indican un hundimiento de los liberal-demócratas, que impediría el retorno a una coalición gubernamental de su líder y vice primer ministro Nick Clegg.
Si la intención de voto se replica en las urnas, se atisban dos coaliciones posibles en torno a la derecha o la izquierda británicas.
En el primer caso se crearía un gobierno arcoíris presidido por Cameron y apoyado por liberal-demócratas, unionistas de Irlanda del Norte y ultranacionalistas ingleses del UKIP de Nigel Farage.
Pero, como demuestra el cartel ´tory´, un arreglo entre Miliband y los nacionalistas parece una opción más factible.
La líder del SNP, Nicola Sturgeon, ha rechazado cualquier pacto con los conservadores pero está dispuesta a sostener un Ejecutivo minoritario laborista en base a futuras negociaciones sobre leyes puntuales.
Esta perspectiva ha puesto en pie de guerra a la derecha británica. Los barones tories y el propio Cameron alertan de que la unión del Reino Unido volverá a estar en peligro, tras la victoria del NO a la independencia del pasado septiembre, con los laboristas dependiendo del SNP para sacar adelante su programa de gobierno.
Así, el anterior primer ministro ´tory´, John Major, exhortó días atrás a Miliband a "rechazar la idea de un gobierno con el apoyo de un partido cuyo principal objetivo es la ruptura del Reino Unido".
Los laboristas continúan sin pronunciarse sobre esta potencial alianza post-electoral al tiempo que sufren una sangría en la intención de voto Escocia.
De acuerdo con las últimas proyecciones, los nacionalistas están bien situados para ganar 49 de los 59 escaños escoceses en Westminster. Salmond entraría en la nueva hornada de diputados de una formación que solo envió tres a Londres en 2010.
El auge del SNP que indican los sondeos es, casualmente, el principal impedimento a una victoria mayoritaria de los laboristas en las generales de mayo.
