Los ingresos de junio a diciembre de 2014 cayeron un 12.2%, a un total de 194.4 millones de euros (unos 268 millones de euros), según informó el club este jueves.
La temporada anterior, el Manchester United se clasificó en séptima posición en la Premier inglesa, cuatro puestos por debajo del acceso automático a la Champions europea.
El fracaso en el terreno de juego ahuyentó a patrocinadores, como Nike, y dentó en un 39% los ingresos anuales del club por la retransmisión de partidos.
Los beneficios se hundieron un 52% en los seis meses hasta el pasado diciembre. No obstante, las ganancias fueron de 8.9 millones de libras (por encima de 12 millones de euros) y el club espera cerrar el año con ingresos totales en torno a los 500 millones de euros.
Las cuentas del ex campeón inglés coinciden con la reciente conclusión de la nueva ronda de la subasta trianual de derechos de retransmisión de los partidos fútbol en la televisión de Reino Unido.
Los dos rivales – la cadena Sky y el grupo de comunicación BT- pujaron un total de 5.140 millones de libras (unos 6.000 millones de euros) por la emisión en directo de 168 encuentros por temporada durante tres años a partir de 2016-2017.
La cifra representa un incremento del 70% respecto a la ronda anterior y supera las previsiones más optimistas de los analistas. Los expertos calculan cada partido costará una media de 12.000 euros al respectivo operador.
SKY pagó caro por mantener su liderazgo en el fútbol por televisión. Según los datos difundidos esta semana, el grupo pujó 4.176 millones de libras por 126 encuentros cada temporada, casi el doble de su apuesta anterior.
BT, que irrumpió en la escena en 2012, comprometió 960 millones de libras por 42 partidos por temporada durante los tres próximos tres años.
La Premier League gestiona la cesión de derechos de emisión y distribuye las ganancias entre la élite del fútbol inglés y el resto de clubs profesionales.
