En mayo pasado el representante de la compañía, Yuri Makushenko, adelantó que Energia y la NASA debatían la construcción de esa estación orbital, la cual podría comenzar a funcionar a finales de 2020.
"Se prevé que los dirigentes de las agencias que colaboran en el programa de la Estación Espacial Internacional presenten el futuro proyecto de creación y explotación de la plataforma orbital lunar en el primer semestre de 2017", dijo Románova al periódico Izvestia.
La nueva estación incluirá módulos habitables, de potencia y de abastecimiento vital, y también medios de transporte.
La plataforma podría convertirse en un puerto para el mantenimiento y reparación de naves y, posteriormente, utilizarse en el lanzamiento de misiones no tripuladas rumbo a asteroides o hacia el planeta Marte.