"Aún no se llegó al límite y la estación podría seguir funcionando hasta 2026", dijo Leónov en una rueda de prensa.
El consejo científico-técnico de la agencia espacial rusa Roscosmos celebró en abril una reunión en la que examinó la posibilidad de crear una estación espacial propia.
El proyecto será realidad sólo si Rusia decide cesar en 2024 su cooperación con los países participantes en el programa de la EEI.
La estación espacial rusa sería creada a partir de tres módulos que se añadirán al segmento ruso de la EEI después de 2017: módulo de laboratorio multiuso, módulo de empalme y módulo científico-energético.
Los módulos están construyéndose en las empresas de Roscosmos.