Anteriormente, los productores de otros países europeos también informaron de pérdidas.
Además, la semana pasada la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) destacaron en su informe la reorientación de los comerciales flujos mundiales debido al embargo ruso.
Gracias a la UE y EEUU otros países como Azerbaiyán, Bielorrusia, China, Israel, Serbia, Turquia y América Latina han visto aumentar los pedidos de productos agrícolas en Rusia.
A principios de agosto de 2014 Rusia decretó el embargo de productos agrícolas procedentes de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega en respuesta a las sanciones impuestas por EEUU y la UE.
La prohibición afecta a leche, pescado, carne, verduras, frutas, frutos secos y embutidos.
El Gobierno ruso prolongó en junio de este año el veto a la importación de alimentos hasta el 5 de agosto de 2016.