"Estamos bajo condiciones meteorológicas extraordinarias que no son previsibles, ni posibles de dominar por el ser humano", aseguró este jueves la ministra lusa de Interior, Costança Urbano.
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— Ines Sainz (@Ines_Sainz) 10 de agosto de 2016
El recuento de incendios hecho público por la Autoridad Nacional de Protección Civil no tiene en cuenta el fuego declarado desde el lunes en el archipiélago de Madeira debido a que dicha región cuenta con un servicio de protección civil independiente.
El incendio de Madeira se ha cobrado hasta el momento la vida de tres personas. Además, ha dejado tres cientos heridos y ha hecho que un millar de personas tuvieran que abandonar sus hogares.
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— me (@not_actuallyme) 10 de agosto de 2016
En el territorio peninsular, el fuego más grave es el registrado en Águeda, en el distrito norteño de Aveiro. La mayoría de fuegos de gran tamaño están localizados en el norte del país.
Además de los tres muertos en Madeira, un agente forestal falleció combatiendo el fuego en la región de Santarem, por lo que el número de decesos a causa de la ola de incendios asciende a cuatro.
La gravedad de la situación ha provocado que Portugal solicitase la activación del mecanismo europeo de Protección Civil, destinado a proporcionar medios de ayuda en situaciones de catástrofe.
Además, el Gobierno luso aseguró también el pasado miércoles haber procedido a la activación de la prealerta para la puesta en marcha de su acuerdo bilateral de colaboración con Rusia en materia antiincendios.