La policía serbia ha detenido a unos 15 hinchas en Belgrado por disturbios ocasionados durante el partido entre Serbia y Albania, según informó la página web de la entidad.
Las golpizas mutuas se desarrollaron en el estadio Partizán de la capital serbia, donde ambos equipos se enfrentaron en un juego de clasificación para la Eurocopa 2016.
A los 41 minutos del encuentro sobre el campo de fútbol apareció un dron pilotado a distancia con una bandera de la denominada 'Gran Albania', hecho que provocó una gran ira entre los espectadores.
En el cartel colgado aparecían también las fotos de Isa Boletini e Ismail Qemali, quienes fueron los primeros en alzar la bandera albanesa en 1912.
El jugador serbio Stefan Mitrovic agarro en el aire la bandera para arrancarla, y acto seguido fue atacado por varios jugadores albaneses. Empezó una pelea entre los dos equipos, en la que intentaron inmiscuirse algunos hinchas.
El árbitro principal del encuentro, el inglés Martin Atkinson se vio obligado a detener, y luego a suspender el juego. En el momento del conflicto los dos equipos aún no habían abierto la cuenta.
"Entre los detenidos hay 14 adultos y un menor de edad. Contra ocho personas hay acusaciones concretas", aseguró el sitio web.
Según se informó anteriormente, se trata del primer juego entre los dos países después de los sucesos de Kósovo, y se supone que en las gradas no debía haber ningún albanés, pero testigos del conflicto aseguran que un pequeño grupo de representantes de Albania estaba presente durante las primera parte del juego y precisamente desde allí se envió el aparato volador.
