Durante esta fase, que se lleva a cabo en el polígono Obuz-Lesnovski, los militares y policías de seis países simularán una misión de mantenimiento de la paz, en particular las operaciones de interposición de las partes de conflicto, vigilancia del armisticio, control sobre el terreno, prevención del tráfico de armas, municiones y explosivos, protección de objetivos vitales, retorno de refugiados y ayuda humanitaria, según el comunicado.
Una parte de los efectivos implicados en los ejercicios realizará entrenamiento nocturno.
Las maniobras, que constan de dos etapas, se prolongarán hasta el 27 de agosto y cuentan con la participación de unos 1.500 efectivos y unas 300 unidades de equipos bélicos, incluyendo aeronaves, carros blindados y vehículos militares.
En la primera etapa, las unidades policiales de las fuerzas de paz colectivas simularon la liberación de rehenes y la captura de terroristas.