Dos divisiones de defensa antiaérea entraron en servicio en la parte central de Rusia, que comprende las regiones del Volga, los Urales y Siberia, comunicó este lunes el coronel Yarosalv Roschupkin, asesor del comandante de las fuerzas del Distrito Militar Central.
"Las nuevas unidades cuentan con sistemas antiaéreos S-300PS y tendrán la tarea de proteger instalaciones administrativas, industriales y militares en la zona de su responsabilidad", dijo Roschupkin a la prensa.
El sistema S-300PS está destinado para proteger importantes instalaciones civiles y militares de ataques aéreos de todo tipo.
Puede interceptar los aviones más modernos, misiles balísticos y de crucero y otros objetivos que vuelan a velocidades de hasta 1.200 metros por segundo a una distancia de hasta 90 kilómetros.
Es un arma altamente resistente a interferencias radioelectrónicas y puede emplearse en cualquier tipo de condiciones climáticas.