Como explicó a Izvestia uno de los geólogos participantes en la investigación, Ígor Pékov de la Universidad Lomonósov de Moscú, la mayoría de los minerales recientemente descubiertos tienen una compleja composición química. En contraste, dravertit tiene una estructura muy simple.
"Por lo pronto no hemos descubierto nada de sus análogos o 'parientes' más cercanos, tanto en propiedades químicas como estructurales, incluso entre muchas otras sustancias inorgánicas sintéticas", dijo Pékov.
Los científicos rusos hicieron este descubrimiento mientras investigaban los campos fumarólicos activos del volcán Tolbachik en Kamchatka. Las fumarolas son las grietas y agujeros en los cráteres de donde salen los gases calientes. Su temperatura en Tolbachik alcanza los 500 grados centígrados.
El espectro infrarrojo y el patrón de rayos X de polvo indican que existe una relación entre el nuevo mineral con la calcocianita: simple sulfato de cobre anhidro, bastante extendido en las fisuras del volcán Tolbachik. A pesar del parentesco, las estructuras son completamente diferentes. La calcocianita es caprichosa; después de varios días de contacto con el aire atmosférico frío que contiene humedad, comienza a transformarse en sulfatos de cobre acuosos. Sin embargo, el dravertit es estable en el aire.
El inusual mineral descubierto fue bautizado dravertit en honor del especialista soviético en estudios de mineralogía, geología y meteoritos, Piotr Dravert.