"Se necesita una paz organizada, un proyecto que sea factible y que permita una transición pacífica, eso sí beneficiaría al Ecuador porque significaría que habrá menos migrantes, menos refugiados", dijo Salgado.
Ecuador aloja a unos 57.000 refugiados de ese país, según datos oficiales.
El miércoles pasado, el Gobierno colombiano y las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) anunciaron que habían llegado a un amplio acuerdo para terminar 52 años de conflicto interno.
Los textos de los acuerdos serán refrendados en un plebiscito el 2 de octubre.
Para Ecuador "es importantísimo, dado el problema que hay no solo en migración, sino en comercio, seguridad (…) Colombia históricamente ha sido uno de los países más cercanos al Ecuador en todos los aspectos", comentó Salgado.
Sin embargo, el experto advierte de los posibles efectos del acuerdo, como la reposición de tierras a sus legítimos dueños que resultaron desplazados.
Muchos de ellos viven en Ecuador, "ya tienen sus vidas hechas aquí y probablemente ya están establecidos por lo que les costará mucho regresar a Colombia", observó.
En ese aspecto la preocupación se centra en los lugares a los que no llega el Estado y en los que vive población civil que constituye la base social de la guerrilla, pues "pueden ser tomados por grupos criminales (contrarios al proceso de paz) y armados", como las bandas remanentes de los paramilitares de ultraderecha.
Este fenómeno podría hacer muy peligrosas ciertas áreas del país "y causar incluso un desplazamiento aún mayor", evaluó Salgado.
Además, dijo, "hay otros grupos que necesitan negociar con el Gobierno colombiano, hay grupos muy conectados al narcotráfico, hay grupos criminales (que son) parte del crimen internacional organizado y que probablemente no se van a reinsertar ni a trabajar políticamente".
Por ello es importante que el proceso sea ordenado y estratégico, insistió el experto.
Las tres provincias ecuatorianas que limitan con Colombia (Esmeraldas, Carchi y Sucumbíos) enfrentan panoramas diversos y problemas similares y deberían coordinar políticas con los departamentos del sur colombiano con los que tienen fronteras, como Nariño y Putumayo.
Además, ambas naciones deben colaborar en "seguridad e inteligencia" y "ponerse de acuerdo lo antes posible para atacar las dificultades en territorio, que es donde están los problemas reales", dijo Salgado.
El experto aseguró que las transiciones "casi nunca son fáciles" ya que siempre habrá sectores beneficiados y perdedores.
"Lo que se quiere es una transición en paz", insistió.
Ecuador es el país de la región que acoge más colombianos que huyen de la guerra, según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
De las 60.000 personas que cuentan con estatus de refugiado en Ecuador, un 95 por ciento son colombianos, indican datos de la Cancillería ecuatoriana.