Al hacer un llamado a la unidad de los bolivianos para hacer respetar sus recursos naturales, lamentó que la clase política chilena siga viendo a Bolivia como un país humillado y ofendido.
"Lo que tenemos que entender que se acabó ese país ofendido, humillado, robado en sus recursos naturales, siento que algunos políticos chilenos piensan que Chile es un Israel latinoamericano, pero no estamos en tiempos de invasiones ni expansionistas… Tratarán de amedrentar con bases militares, pero no van a poder", declaró Morales.
Bolivia y Chile mantienen una controversia sobre la propiedad y uso de las aguas de los manantiales del Silala que, de acuerdo con el Gobierno boliviano nacen en el sur del departamento de Potosí (sur) y son usufructuadas de manera ilegal por empresas privadas extranjeras en territorio chileno.
"Vamos a hacer respetar nuestros derechos: una cosa es defenderse y otra cosa es hacer respetar nuestros derechos; queremos ser buenos vecinos, no queremos ganadores ni perdedores con esta demanda; queremos construir una hermanad, una buena vecindad", aclaró el presidente boliviano.
Morales reconoció que Chile y Bolivia se necesitan y que deben coincidir en impulsar programas productivos y otros que hagan frente las consecuencias del cambio climático.
El pasado 6 de junio, el Gobierno de Michelle Bachelet demandó a Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya exigiendo que se defina si las aguas del Silala son de curso internacional.