Ante esto, Correa llamó a los oficialistas a concentrarse y "repletar" la plaza frente a la presidencia la tarde de este jueves. "Hemos recibido insultos, vejámenes. Responderemos con paz, con alegría, pero con firmeza. ¡Por fin podré estar junto a ustedes!", escribió en su Twitter.
¡Ánimo queridos compañeros! Tod@s a repletar Plaza Grande desde las 4 P.M. Hemos recibido agresiones, insultos, vejámenes. Responderemos…
— Rafael Correa (@MashiRafael) 2 июля 2015
…con paz, con alegría, pero con firmeza. ¡Por fin podré estar junto a ustedes! El pasado, no volverá. ¡Hasta la victoria siempre!
— Rafael Correa (@MashiRafael) 2 июля 2015
"Lamentablemente tenemos claros indicios de que los golpistas intentarán tomarse Carandolet", la sede presidencial, había dicho Correa el miércoles.
El ministro del Interior, César Navas, dijo que la información se obtuvo de denuncias ciudadanas que fueron investigadas por el Servicio de Inteligencia, según El Diario.
La oposición rechazó las acusaciones este jueves.
El legislador Andrés Páez dijo que eso es "un cuento que nadie cree", según El Diario de Ecuador.
Mientras, la dirigente indígena Lourdes Tibán afirmó que "nadie va a tumbar al señor Correa, él se va a caer solo", y que Ecuador no solo necesita paz por la visita del papa –que llega el domingo- sino antes, durante y después de ella.
La iglesia Católica pidió no politizar la visita del papa.
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Francisco "no viene a nuestro país para consagrar ninguna ideología política, ningún régimen político", dijo el portavoz de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, David de la Torre. "No es el momento de manifestar nuestras ideas ni nuestros proyectos políticos. No es el momento de armar más polémicas y más divisiones", añadió.
