"Mi opinión: es algo terrible y extremadamente penoso porque los siete detenidos son de América Latina y el Caribe; es una vergüenza para la región", dijo citado por la agencia Andes.
El mandatario ecuatoriano indicó que la posible investigación a las asociaciones de fútbol nacionales "corresponde a la Fiscalía", pero prometió su apoyo "para todo lo que sea transparencia".
El pasado miércoles varios altos cargos de la FIFA fueron detenidos en Zúrich por sospecha de corrupción: el uruguayo Eugenio Figueredo, el caimanés Jeffrey Webb y su colaborador Costas Takkas, el costarricense Eduardo Li, el nicaragüense Julio Rocha, el venezolano Rafael Esquivel y el brasileño José Maria Marin.
Aunque la Justicia estadounidense no imputó a funcionarios ecuatorianos de la FIFA, la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) tuvo que desmentir la acusación de un soborno de 1,5 millones de dólares supuestamente recibido de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
El pasado jueves el abogado de la FEF, Guillermo Saltos Güale, afirmó que el citado valor pertenece legalmente a esta asociación, ya que le fue concedido para la preparación de Ecuador en la próxima Copa América.