"Los expertos consideran (…) que EEUU se verá en una posición estratégicamente desventajosa mientras no recupere el tiempo perdido y no cree una nueva hornada de expertos sobre Rusia", afirma el artículo.
El periódico considera que la razón principal de esta carencia radica en la falta de financiamiento de investigaciones sobre Rusia en las instituciones estatales, universidades y centros analíticos (tanques pensantes), lo que condujo a una caída récord del interés hacia el idioma ruso entre los estudiantes.
"Expertos, legisladores y exfuncionarios de la administración describen unos órganos de seguridad nacional que antes estaban colmados de especialistas experimentados sobre Rusia, incluyendo los más altos niveles con capacidad de tomar decisiones, pero que ahora se basan en un régimen más libre, con el uso de expertos menores, que no tienen posibilidades de incidir directamente en la política", señala el escrito.
Sorpresas a cada instante
Los principales especialistas en inteligencia y seguridad nacional advierten que los conocimientos sobre Rusia y las capacidades de recopilar información sobre sus intenciones "no alcanzan" el nivel necesario, según The Washington Post.
En consecuencia, las acciones de Rusia resultan impredecibles para el establishment de EEUU, confiesan influyentes miembros del Congreso.
"Cada paso ha resultado para nosotros una sorpresa; fue una sorpresa cuando avanzaron hacia Crimea, fue una sorpresa cuando avanzaron hacia Siria", declaró el senador y excandidato presidencial John McCain, presidente del Comité de las Fuerzas Armadas del Senado.
"Debemos duplicar los esfuerzos para mirar con nuevos ojos a Rusia", considera el presidente del Comité de Inteligencia del Senado, Richard Barr.
Las fuentes del periódico citan entre los expertos en Rusia a la importante asesora del presidente Obama, Celeste Wallander, y a la portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Victoria Nuland, pero destacan que la administración apenas cuenta con otras personas con ese nivel de conocimientos en el tema.
"Cuando un alto funcionario de la administración se dirige al Capitolio, se supone que es un experto en la materia, pero el secreto ‘sucio’ consiste en que nuestras capacidades son terribles", afirmó Matthew Rojanski, director del Instituto Kennan, centro especializado en Rusia.
Según el experto, en cierta ocasión debió comentar la situación en Bielorrusia con un grupo de funcionarios, ninguno de los cuales había estado jamás en el país.
Existen departamentos enteros de la OTAN que no disponen siquiera de una sola persona que fuese capaz de leer la prensa rusa, añadió Rojanski.
Se acercan cambios…
El miembro del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, declaró que las prioridades respecto a Rusia eran menores mientras no era vista como una amenaza, pero ahora los cambios son "imprescindibles".
El congresista afirmó que la política de Moscú es impredecible y que en solo un día es imposible preparar expertos sobre Rusia, además de observar que este país ha desarrollado su inteligencia electrónica y su seguridad operativa.
Respecto a la predictibilidad, la investigadora Fiona Hill, exespecialista del Consejo de Inteligencia Nacional y actualmente uno de los directivos del Instituto Brookings, se permitió disentir de Schiff.
"Eso sería lo mismo que afirmar que si ellos no nos contaron sobre su estrategia entonces nosotros no podremos adivinarla, cuando en realidad esto requiere tiempo, esfuerzos y conocimientos de expertos", destacó.
Las acciones de Rusia también dificultan los estudios sobre este país en EEUU, consideran los expertos.
En particular lamentan que la reducción de programas de intercambio de estudiantes dificulta la preparación de especialistas estadounidenses en el tema ruso.
"Los enfrentamientos diplomáticos y de sanciones existentes entre EEUU y Rusia ya han reducido las posibilidades de un intercambio educativo y de negocios, y las leyes rusas sobre agentes extranjeros y organizaciones non gratas han complicado las posibilidades de los norteamericanos de pasar tiempo en este país", afirma el periódico.
El exembajador de EEUU en Rusia, Michael McFaul, declaró que su país cometió un error al considerar que Rusia estaba débil, ya que en estos momentos es una de las mayores potencias, y esto no cambiará en el futuro próximo.
"El error cometido 20 años atrás se basó en el supuesto de que Rusia es un país débil, un país en decadencia; se puede discutir sobre si es una gran potencia o es media, pero en realidad es una de las mayores, que se encuentra entre las 5 o 10 economías principales, la principal potencia nuclear en el mundo, y ahora, considerando las inversiones hechas por Putin en el ejército, es también una de las mayores potencias en el mundo", afirmó.
McFaul concluyó afirmando que "estas tendencias no cambiarán en los próximos 20 o 30 años".
