"Es absolutamente imperativo que nos pongamos de acuerdo como país para que todas estas aristas sean limadas. No lo vamos a poder evitar, pero si, por lo menos, limar las aristas, que hagan el menor daño posible", evaluó Mauricio Merino, académico y coordinador general del movimiento civil Nosotrxs.
Durante las últimas semanas, Merino y Nosotrxs se han dedicado a impulsar una propuesta ante la Cámara de Diputados para crear un ingreso vital en México. La medida pretende aliviar la situación económica provocada por la pandemia a partir de la entrega de apoyos económicos por tres meses a los sectores más afectados por la crisis económica en el país. Hasta ahora ha sido adoptada por cuatro diputadas de distintos partidos políticos.
"Creemos que esta propuesta coincide con lo que el presidente ha venido impulsando, en términos de ayudar a los pobres por el bien de todos. Esto encaja como anillo al dedo con su filosofía, porque es para ayudar a la gente que más lo necesita en una circunstancia particularmente dolorosa, de pérdida de ingresos. Tenemos la esperanza de que prospere", consideró el politólogo y exconsejero electoral del extinto Instituto Federal Electoral.
Merino considera que el avance de esta iniciativa es un primer paso hacia el proceso de recuperación de derechos vitales. Desde su perspectiva, la crisis sanitaria internacional abre la oportunidad para revisar las prioridades de los gobiernos a nivel mundial, así como para reevaluar el papel cumplido por los Estados nacionales durante los últimos 50 años.
En particular, el politólogo mexicano apunta al establecimiento de mínimos vitales como una medida que permitirá superar las condiciones que dejará a su paso la actual crisis económica. Asimismo, anticipa la posibilidad de recuperar algunos de los principios administrativos aplicados durante la posguerra.
Para Merino, el ejemplo de los países escandinavos —también destacado por López Obrador en cuanto a la distribución de derechos básicos— debe servir como muestra de la nueva realidad a la que debe aspirar el mundo, y México en específico, a partir de la pandemia.
"[En Dinamarca, Noruega, Suecia] Están dispuestos a pagar impuestos muy altos a cambio de Estados muy comprometidos con su bienestar, muy eficientes, que no necesitan estarse peleando por la honestidad y la corrupción como es el caso mexicano, porque tienen instituciones de Estado que funcionan no sólo por los gobernantes, sino porque la gente las vigila y las hace suyas. No son clientes electorales de los partidos, son ciudadanos con derechos. Hacia allá tiene que caminar el mundo", anticipó.
Sobre esto, Merino también consideró que el papel central en el debate será jugado por Andrés Manuel López Obrador. La discusión sobre las prioridades de su administración, así como los procesos de implementación de sus políticas, serán de vital importancia para saber dónde quedará posicionado el país latinoamericano frente al mundo.