"El calentamiento global va a continuar por décadas y deberíamos entender sus efectos y actuar con determinación", por lo que el "acuerdo climático de París es el pilar de la mitigación del cambio climático", dijo Soini.
El texto establece medidas para evitar que el aumento de la temperatura media mundial no sobrepase los dos grados centígrados, respecto de la media de la era preindustrial.
Tales medidas deben focalizarse en abatir las emisiones de gases de efecto invernadero, y los países firmantes asumieron compromisos nacionales para tal efecto.
La región del Ártico se ha mostrado particularmente sensible al cambio climático y ya registra aumentos de temperatura y un ritmo creciente de derretimiento de hielos.
El Consejo Ártico es un foro intergubernamental del que hacen parte EEUU, Canadá, Noruega, Dinamarca, Islandia, Suecia, Rusia y Finlandia.
Además, seis organizaciones internacionales que representan a los pueblos indígenas árticos tienen estatus de miembros permanentes.
En 2013 se incorporaron como miembros observadores permanentes Italia, China, Japón, Corea del Sur, India y Singapur.
El organismo se ocupa de las cuestiones relativas al desarrollo sostenible de la región y a la protección de su ambiente.