La reunión de los tres poderes del Estados brasileño, poco frecuente, se produce el mismo día en que el Anuario de Seguridad Pública publicó un informe en el que destaca que a lo largo de 2015 en Brasil murieron asesinadas 58.383 personas.
Entre los temas tratados están la creación de una comisión parlamentaria que investigue la presencia del crimen organizado en las elecciones y la posibilidad de que los cuerpos policiales de cada país del Mercosur puedan detener a los delincuentes que crucen las fronteras.
Temer aseguró que a partir de ahora intentará realizar este tipo de reuniones regularmente y que más adelante las coordinarán los gobernadores y los secretarios de seguridad de los respectivos Estados, ya que las competencias en seguridad están transferidas.