El mejor salto de Klishina en sus tres intentos durante la final —6,63 metros— resultó insuficiente para seguir disputando las preseas.
Las estadounidenses Tianna Bartoletta (7,17 metros) y Brittney Reese (7,15 metros) se llevaron el oro y la plata en salto de longitud; la serbia Ivana Spanovic ganó el bronce (7,08 metros).
Klishina quedó la única representante del atletismo ruso autorizada a competir en Río después de que el 21 de julio el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) rechazase el recurso interpuesto por el Comité Olímpico de Rusia y decenas de atletas rusos contra la decisión de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) de suspender a los atletas rusos de los Juegos de Río.
La semana pasada, la IAAF suspendió a Klishina de los Juegos, la decisión que la atleta recurrió ante el TAS.
El TAS avaló la apelación de Klishina y le permitió participar en los Juegos 2016.
Una comisión independiente de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA), dirigida por Richard McLaren, dio por probada a mediados de julio la existencia en Rusia de un extenso programa de dopaje apoyado por las autoridades, tras lo cual la WADA recomendó al Comité Olímpico Internacional (COI) apartar de los Juegos de Verano a la selección rusa en su conjunto.
Tema: Escándalo de dopaje en Rusia
Sin embargo, el Comité Ejecutivo del COI rehusó suspender a toda la selección delegando a las federaciones deportivas el derecho a determinar quién podrá representar a Rusia en los Juegos de Río 2016.