"Está haciendo un trabajo horrible, terrible", ha dicho.
Además, ha dicho que "por suerte" el esquema de seguridad previsto para los Juegos no es responsabilidad única del Estado de Río, ya que habrá efectivos que dependen del Estado central, como el Ejército y la Marina.
En total se prevé que 85.000 hombres cuiden de la seguridad durante los Juegos, que arrancan el 5 de agosto.
Para el alcalde la cuestión de la seguridad es la más preocupante de cara a los Juegos, y en este sentido ha minimizado con ironía la preocupación que existe a nivel internacional con el virus del zika: "En este momento si usted es americano, por favor no vaya a Florida, hay más casos de zika en Florida que en Río", ha dicho.
Hasta hace pocas semanas el alcalde de Río había mantenido un perfil bajo, evitando criticar la gestión del Gobierno del Estado y limitándose a señalar que las arcas municipales estaban saneadas, al contrario que las del Estado, cuyo gobernador, Francisco Dornelles, se vio obligado a decretar el "estado de calamidad pública".
Sin embargo, Paes empezó a criticar abiertamente la gestión de sus colegas en el Estado en los últimos días; en las redes sociales lamentó la forma en que el gobernador decretó el estado de bancarrota —un viernes por la tarde y sin dar explicaciones en público— y aseguró que lo que tenía que hacer era "arremangarse y ponerse a trabajar".