"Nuestros trabajadores, los diplomáticos rusos, se enfrentan constantemente a provocaciones por parte del FBI y la CIA; en particular, los agentes de estas estructuras no se limitan al aplicar contra nuestros diplomáticos medidas inadmisibles que incluyen la presión, incluso psicológica y en presencia de sus familias", afirmó.
Zajárova realizó estas declaraciones al comentar un artículo publicado recientemente en Washington Post sobre la supuesta presión ejercida en Rusia contra los diplomáticos norteamericanos.
La nota publicada en el periódico estadounidense The Washington Post describe una serie de supuestos "actos de acoso" contra diplomáticos occidentales que "varían de lo extraño a totalmente aterrador", entre ellos el seguimiento de diplomáticos y miembros de sus familias, la presencia de agentes en eventos sociales sin invitación, notas negativas pagadas en la prensa, el ingreso en las viviendas de los diplomáticos durante la noche para cambiar de lugar los muebles o encender las luces y la televisión.
Según el diario, Kerry planteó este asunto al presidente ruso Vladímir Putin en una reunión celebrada en Moscú en marzo pasado.
La Cancillería rusa desmintió estas acusaciones categóricamente, señalando su carácter infundado.